jueves, 8 de enero de 2015

Adornos para el árbol personalizados y propósitos para el 2015

¡Hola a todos!
¿Qué tal lleváis la vuelta a la rutina? Nosotros nos hemos tenido que tomar fiesta obligada por diversas averías. ¡Vaya fastidio! ¡Esperamos que el resto del año sea más tranquilo!
¿Habéis empezado a recoger toda la decoración navideña? Nosotros todavía no, nos da pena y pereza a partes iguales, jajajaja.
Hablando de decoración, hoy queremos enseñaros dos adornos para el árbol que pintamos y cosimos las pasadas fiestas.
Las ideas fueron de Carla, que estaba al frente de la tienda Momentos Chic. Después de varios años de aventura, Carla decidió cerrar las puertas de este estupendo establecimiento los últimos días de 2014. Quería tener un recuerdo de esta etapa de su vida y nos pidió una bolita para colocar en su árbol. Tenía que aparecer su logo, los años en los que estuvo abierta y las bolsitas tan características en las que te entregaba tus compras.
 


Y para que su hija Olivia también tuviera su propia bola de Navidad, nos pidió que tuviera forma de etiqueta, que incorporáramos un corazón de cruceta y que aparecieran sus datos de nacimiento: fecha, hora, peso y medida. Además, al ser de fieltro y rellena de guata, es blandita y Olivia la podrá manejar sin ningún riesgo.


Aquí otras vistas de los dos adornos.



Y ahora en lugar de hablar del pasado, hablemos del futuro: ¿Qué propósitos tenéis para este 2015? Por mi parte, cansada de proponerme metas imposibles, este año sólo he fijado 4 muy sencillitas que espero cumplir.


 1- Sacar con más frecuencia a pasear lápices, pinturas y pinceles (fuera de lo estrictamente profesional, ya me entendéis). Vamos, dibujar por dibujar, que para eso tengo un montón de libretas esperando en el cajón y un buen puñado de ideas que al final se olvidarán.
2- Mover las piernas. Ya no digo ir a correr, ni apuntarme a un gimnasio, porque sé que no lo voy a cumplir. Con salir a andar me doy por contenta, porque no me muevo nada de nada ¡y no puede ser! Antes caminaba bastante y lo echo de menos, así que espero volver a retomar este hábito.
3. Reservar tiempo para el ocio. Trabajar en casa y en artesanía, donde el tiempo está tan mal pagado, conlleva dedicarle muuuuuuchas horas. Y claro, luego no tienes tiempo para nada. Pues toca proponerse destinar unas horas (igual alguna vez incluso un día entero, jejeje) a tocarse la barriga o lo que se tercie. Desempolvar la cámara de fotos, planear alguna escapadita, cocinar platos ricos, leer, momentos de sofá-peli-manta...
4. La cuarta idea hace mucho tiempo que estaba en la recámara, así que aprovechamos el inicio del año para ponerme en serio. De vez en cuando prepararemos algún tutorial facilito, para todos los públicos. De hecho, os confieso que hoy he hecho fotos para el primero.
En realidad habría muchos más deseos que me gustaría afrontar, pero mejor ir poquito a poco. ¡Preparados para el 2015!

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